El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se unió este lunes a más de 20 líderes mundiales en Sharm El-Sheikh, Egipto, para conversaciones sobre el futuro de Gaza, coincidiendo con la primera fase del acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás.
Entre los presentes estuvieron el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas; el presidente francés, Emmanuel Macron; el canciller alemán, Friedrich Merz; el primer ministro británico, Keir Starmer; el ex primer ministro británico Tony Blair; así como representantes de Qatar, Egipto, Jordania, Emiratos Árabes Unidos y Turquía.
Los líderes posaron para la tradicional foto grupal frente a un cartel con la inscripción “Paz 2025”, antes de la ceremonia de firma del acuerdo de alto el fuego.
Trump, el presidente egipcio Abdel Fattah el-Sisi, el presidente turco Recep Tayyip Erdoğan y el emir qatarí Tamim bin Hamad Al Thani firmaron formalmente el documento, que según Trump “establecerá muchas reglas y regulaciones y muchas otras cosas”. Durante la firma, Trump declaró:
“Esto ha tomado 3.000 años para llegar a este punto. ¿Pueden creerlo? Y también va a sostenerse. Va a sostenerse.”
El memorándum, denominado “Declaración Trump para la Paz y Prosperidad Duradera”, establece compromisos generales de los cuatro líderes para respaldar el plan de paz de Trump, aunque se considera en gran parte simbólico. El documento destaca la importancia de garantizar los derechos humanos fundamentales, la seguridad y la dignidad tanto de palestinos como de israelíes, y de resolver futuras disputas mediante el diálogo diplomático en lugar de la fuerza o conflictos prolongados.
Horas antes, Trump y Netanyahu intercambiaron elogios durante un discurso del presidente estadounidense en el parlamento israelí. Trump calificó a Netanyahu como “uno de los mayores” líderes en tiempos de guerra, mientras que Netanyahu lo llamó “el mejor amigo de Israel” en la Casa Blanca. Trump también declaró un “nuevo amanecer en Medio Oriente” y anunció que la guerra en Gaza había terminado, aunque reconoció que quedan desafíos para garantizar una paz duradera.
Como parte del acuerdo de alto el fuego, Hamás liberó a los 20 rehenes israelíes restantes, y Israel liberó a prisioneros palestinos, con emotivas escenas de reunificación familiar en Tel Aviv y Gaza. Además, se implementaron protocolos de verificación en los pasos fronterizos y retenes conjuntos para supervisar la liberación de prisioneros y la entrada de ayuda humanitaria a Gaza, asegurando el cumplimiento del acuerdo.
A pesar del avance, persisten preguntas sobre los próximos pasos y el papel que jugará personalmente el presidente Trump en la configuración del Gaza posterior a la guerra, incluyendo la supervisión de la seguridad en la región y el monitoreo de la reconstrucción y entrega de asistencia humanitaria.