Este miércoles 7 de agosto, la jefa del Comando Sur de Estados Unidos, la general Laura Richardson, enfatizó en una entrevista con EFE que la solución a la crisis de Venezuela debe ser democrática, no militar. Resaltó la importancia de la transparencia en la publicación de los resultados electorales para reflejar la voluntad del pueblo venezolano.
Richardson insistió en que «no necesitamos recurrir a una solución militar para esto. Democráticamente, publicar los resultados de la votación y mostrar la voluntad del pueblo». Esta declaración fue hecha en Panamá, donde se reunió con varias autoridades, incluyendo el presidente panameño José Raúl Mulino.
Desde su posición como jefa del Comando Sur, Richardson lidera un comando de más de 1,200 militares y civiles, encargados de proporcionar planes de contingencia y cooperación en seguridad en 31 países de América Latina y el Caribe, incluido Venezuela.
Richardson desmintió la desinformación sobre una posible intervención militar en Venezuela y reiteró que la crisis electoral debe resolverse democráticamente. Destacó el apoyo del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, quien reconoció la victoria electoral del líder opositor y validó los documentos presentados por la oposición.
«Espero que haya un final democrático y que se pueda resolver democráticamente. La transparencia en los votos es crucial», subrayó Richardson, recordando que más de 12 millones de venezolanos acudieron a votar.
Migración Venezolana
Desde la proclamación de los resultados, las protestas en Venezuela han incrementado la violencia e inestabilidad, lo que podría aumentar aún más el número de venezolanos que se ven obligados a abandonar el país, actualmente casi 8 millones de personas, describiendo la situación como una «crisis humanitaria muy grave».
Crisis en Haití
Richardson enfatizó que la estrategia para reducir la migración irregular debe centrarse en crear condiciones seguras para que las personas no quieran irse. También destacó el impacto de la pandemia de COVID-19 en el aumento de la pobreza en la región, lo cual ha sido aprovechado por organizaciones criminales transnacionales.
Richardson también abordó la situación en Haití, donde casi 3,900 personas resultaron muertas o heridas por la violencia de bandas armadas en el primer semestre del año. Un contingente de policías kenianos ha sido desplegado en Puerto Príncipe para apoyar a la Policía Nacional de Haití.
La general aseguró que Estados Unidos está apoyando con logística y que no se verán uniformes militares estadounidenses en Haití. Aunque es probable que no esté al frente del Comando Sur para ver la resolución de la crisis haitiana, Richardson expresó su esperanza de que Haití tenga una oportunidad para recuperarse.
Noticia al Día / EFE