Mérida, sábado [fecha]. En un emotivo acto realizado en la Santa Iglesia Catedral Basílica Menor Inmaculada Concepción, se llevó a cabo la bendición de la restaurada Santa Cruz Arzobispal, un símbolo sagrado que representa vida, fe y salvación para la comunidad merideña.
La cruz, diseñada por el arquitecto Manuel Mujica Millán en 1958, fue sometida a un proceso de restauración que incluyó el uso de materiales avanzados como pintura antioxidante, poliuretano acrílico y elementos de ingeniería civil para su anclaje y preservación. También se añadieron mosaicos decorativos que, con la luz solar, producen un efecto de gloria, destacando su relevancia espiritual y estética.
El arzobispo metropolitano de Mérida, monseñor Helizandro Terán, expresó su alegría por la instalación de esta nueva cruz, afirmando que tras 70 años de deterioro, el cambio era necesario. Asimismo, agradeció el trabajo de artistas, especialistas y obreros que participaron en esta significativa obra, que combina arte, fe y tradición para enriquecer el legado de la Catedral.
Con una altura de 3 metros y un peso de 130 kilogramos, la cruz restaurada se erige ahora como un renovado símbolo de espiritualidad para el pueblo de Mérida.