Un ataque generalizado de Estados Unidos contra las instalaciones nucleares de Irán ha dejado a muchos iraníes profundamente preocupados por una posible escalada del conflicto, mientras que Teherán afirmó que se reserva “todas las opciones” para responder y acusó a Washington de haber saboteado los esfuerzos diplomáticos.
Después de que el presidente Donald Trump afirmara en un discurso el sábado por la noche que las instalaciones de enriquecimiento nuclear de Irán habían sido “aniquiladas”, el principal diplomático iraní advirtió sobre “consecuencias eternas” ante lo que calificó como hechos “indignantes”. “Irán se reserva todas las opciones para defender su soberanía, sus intereses y a su pueblo”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores, Abbas Araghchi, en X, acusando más tarde a Washington de sabotear las conversaciones tras una reciente reunión con ministros europeos.
Trump no presentó pruebas del impacto de los ataques, y expertos en armamento nuclear señalaron que no sería posible una evaluación independiente hasta que estuvieran disponibles imágenes satelitales.
Aunque el gobierno iraní aún no ha ofrecido una evaluación de los daños, algunos funcionarios locales minimizaron el impacto, diciendo que las instalaciones nucleares atacadas habían sido evacuadas y que el material nuclear había sido trasladado a otro lugar. Manan Raeisi, un legislador iraní que representa a Qom —donde se encuentra una de las instalaciones fuertemente fortificadas—…/Mas información The Washington Post
El canciller iraní viaja de urgencia a Moscú tras ataques de EE. UU. a instalaciones nucleares
El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, anunció este domingo un viaje de emergencia a Moscú para reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, horas después de que Estados Unidos atacara tres instalaciones nucleares en territorio iraní.
Araghchi subrayó la alianza estratégica entre Teherán y Moscú, afirmando que ambos gobiernos “coordinan estrechamente sus posturas”. Irán ha sido clave en el suministro de drones militares a Rusia para la guerra en Ucrania, recibiendo a cambio apoyo para su programa nuclear civil.
Desde el Kremlin, el portavoz Dmitry Peskov advirtió que cualquier intento de desestabilizar el liderazgo iraní —incluyendo el asesinato del líder supremo Ali Jameneí— sería “abrir la caja de Pandora” y provocaría una oleada de extremismo en la región.
Este repentino giro en la crisis nuclear intensifica las tensiones globales y pone a prueba las alianzas estratégicas en Medio Oriente y Europa Oriental.