Agustín Volcanes
Fotos:AV
El Colegio de Médicos del Estado Mérida, la Arquidiócesis de Mérida representada por Mons. Helizandro Terán, así como un grupo de sacerdotes, seminaristas, invitados especiales y miembros de la comunidad merideña, participaron en el acto de develación del mural con la imagen del Dr. José Gregorio Hernández que desde este 23 de abril honrará permanentemente al primer santo venezolano, el Médico de los Pobres.
Este homenaje al Dr. José Gregorio Hernández comenzó con una misa de acción de gracias oficiada por el Arzobispo de Mérida en el auditorio de la institución.
En la homilía, Terán Bermúdez expresó que, venía a esa Eucaristía para agradecer al Señor por tan maravilloso regalo a nuestra tierra venezolana, y para develar y bendecir el hermoso mural que adornará y engalanará la sede del Colegio de Médicos del Estado Mérida.
Hoy, después de tantos años, vemos a este venezolano nuestro en la gloria de los altares; como dijo el Papa Francisco en su mensaje a los venezolanos “el médico de pueblo está junto a Dios y junto a Nuestra Señora de Coromoto para interceder por sus connacionales y por todos nosotros”.
Finalizó expresando Mons. Helizandro que, la bendición de ese mural en honor a José Gregorio Hernández es símbolo de fe en nuestro santo y también signo de colegialidad médica que une al santo con nuestros galenos merideños.
Por su parte, el Dr. Cristian Pino, Presidente del Colegio de Médicos, al final de la Eucaristía expresó que, este día quedará grabado en el alma y en la memoria del gremio médico venezolano. Un día en el que la fe, la ciencia y el arte se entrelazaron en una sinfonía de esperanza.
Este mural que hemos llamado “Nuestro Santo Venezolano” es más que una imagen en mosaico, es un espejo donde se refleja el rostro sereno y firme del Dr. José Gregorio Hernández, también el de cada médico sigue eligiendo sanar, acompañar y consolar. José Gregorio no está solo en las alturas del mural, está en cada mirada solidaria de nuestros médicos, en cada guardia interminable, en cada consulta ofrecida sin esperar nada a cambio.
Cristian Pino, agradeció también al artista Luis Enrique Mogollón, que, con más de cuarenta mil piezas, ha tejido un homenaje que respira luz.
Al finalizar la misa, los presentes salieron hasta donde estaba el mural y el Arzobispo de Mérida lo bendijo, y se procedió a develar el mural, una lluvia de pétalos de rosas cayó sobre los asistentes.