Seis de los ocho estadounidenses detenidos en Venezuela fueron liberados este viernes 31 de julio, luego de una reunión entre el enviado especial del gobierno de Donald Trump y el presidente venezolano Nicolás Maduro en Caracas, anunció el propio funcionario de Estados Unidos.
«Nos ponemos en marcha y nos dirigimos a casa con estos seis ciudadanos estadounidenses. Acababan de hablar con @realDonaldTrump y no podían dejar de agradecerle», dijo en X Richard Grenell, sin identificar a los liberados.
«Me acaban de informar que traeremos a seis rehenes de Venezuela a casa. Gracias a Ric Grenell y a todo mi personal. ¡Buen trabajo!», celebró Trump en esa red social.
Washington, que reiteró este viernes que no reconoce a Maduro como presidente, aclaró previamente que la misión de Grenell en Venezuela era «muy específica» y tenía como objetivo conseguir la liberación de ciudadanos estadounidenses detenidos en cárceles venezolanas, así como lograr que Caracas acepte vuelos de deportación de migrantes indocumentados.
Según la organización Independent Venezuelan American Citizens (IVAC), con sede en Miami, se computaban ocho ciudadanos estadounidenses presos en Venezuela, la mayoría desde 2024.
Tras el encuentro de Maduro con Grenell en el Palacio de Miraflores, la Administración chavista explicó en un comunicado que uno de los «diversos temas de interés para ambos países» abordados fue la situación de «ciudadanos estadounidenses incursos en delitos en territorio nacional», así como la migración y el impacto «negativo» de las sanciones económicas.
En ese pronunciamiento, Caracas expresó su disposición a mantener «canales diplomáticos abiertos» con EE.UU., país al que Maduro «planteó la construcción» de una «agenda cero para un nuevo comienzo en las relaciones bilaterales», rotas desde 2019.
En el salón donde se celebró el encuentro, con las banderas de Venezuela y EE.UU., también se encontraba el presidente del Parlamento y jefe negociador de Maduro, Jorge Rodríguez, quien representó al Ejecutivo venezolana en reuniones con funcionarios de la anterior Administración estadounidense.
En paralelo, Trump aseguró este viernes que no permitirá la compra de petróleo a Venezuela como hizo su antecesor, Joe Biden, quien alivió el esquema de sanciones con la emisión de licencias a empresas extranjeras, entre ellas, la estadounidense Chevron, para operar en el país caribeño, que cuenta con las mayores reservas probadas de crudo