Estados Unidos impuso una nueva ronda de sanciones a 21 altos funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela.
Así lo anunciaron este miércoles el Departamento del Tesoro, el Departamento de Estado y la Casa Blanca, según declaraciones de un alto cargo del gobierno estadounidense citado por varias agencias de noticias.
Las sanciones responden al papel de todos ellos en el presunto “fraude electoral” cometido durante los comicios del 28 de julio y la subsiguiente “represión” de las protestas populares y contra miembros de la oposición.
Según recoge la página web del Tesoro estadounidense, entre los nuevos integrantes de la lista están el ministro de Despacho de la Presidencia, Aníbal Coronado, el de Comunicación, Freddy Ñáñez, y el de Servicios Penitenciarios, Julio García Zerpa.
Asimismo, están incluidos altos mandos de la Guardia Nacional Bolivariana, la Policía Nacional Bolivariana, el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) y la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), a los que se acusa de “reprimir violentamente las manifestaciones pacíficas” tras las elecciones.
Entre ellos está Alexis Rodríguez Cabello, director del SEBIN y primo del ministro de Interior, Diosdado Cabello, y también el jefe de la DGCIM y de la Guardia de Honor Presidencial, Javier Marcana Tabata.
“No se trata únicamente de hacer que Nicolás Maduro rinda cuentas. Los cargos que actúan de manera ilegal para sostener su régimen, basándose en tácticas represivas, también se van a encontrar en el punto de mira de esas sanciones”, declaró el representante del gobierno estadounidense que dio a conocer la noticia.
Bloqueo de propiedades
La decisión implica el bloqueo de las propiedades que los sancionados poseen en EE.UU. y la imposibilidad de que estos lleven a cabo transacciones financieras./bbcmundo